Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de
Seguridad Ciudadana, señaló que el feminicidio
de la niña Fátima “no fue por dinero”.
En conferencia de prensa, el titular de la policía
capitalina señaló que por respeto a Fátima,
“queremos ser cuidadosos de lo que pasó, es una
tragedia, un crimen atroz”.
“No fue por dinero el móvil, de ahí a las
intenciones que haya tenido este sujeto, lo que sí
queremos es evitar una situación de morbo y decir que no fue por dinero”, dijo García
Harfuch.
Por su parte, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo que el crimen atroz contra Fátima
va a ser castigado.
Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Najera, los presuntos responsables de
la desaparición y feminicidio de la niña Fátima, fueron detenidos en el Estado de México.
‘La captura se logró con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la Policía de
Investigación, la Guardia Nacional y de las autoridades del Estado de México.
Detenidos por otro delito
Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Nájera, presuntos responsables del
feminicidio de Fátima, están detenidos en el municipio de Atizapán por el delito de cohecho,
pues al momento que policías de diversas corporaciones los cercaron, “ofrecieron 500 pesos”
para que los dejaran ir.
Por estos hechos, conforme lo indica el nuevo sistema de justicia, los imputados podrían
permanecer hasta 48 horas -luego de su detención- en aquel lugar, en ese lapso, la Fiscalía
capitalina tendrá que judicializar el caso, esto es, que un juez gire las órdenes de aprehensión
por el plagio y feminicidio de Fátima, sin embargo, García Harfuch confió en que en unas
horas se liberen las órdenes.
Fuentes cercanas a la investigación revelaron que de momento, la FGJ no ha localizado el
arma homicida -un supuesto cinturón- y tampoco se tienen las pruebas genéticas ni de ADN
que vinculen la agresión sexual que presuntamente Mario Alberto ejerció sobre la menor.
Legalmente, las autoridades cuentan con 48 horas para poder obtener las órdenes.
Los presuntos responsables permanecen en la Fiscalía de Atizapán de Zaragoza, en donde aún
se espera el oficio de colaboración por parte de las autoridades capitalinas, para el delito por el
que se les requiere.