El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI),
Thomas Bach, señaló este miércoles al término de dos días de reuniones del
Comité Ejecutivo de este organismo que ni cancelar ni posponer los Juegos
Olímpicos de Tokio 2020 debido a la epidemia de COVID-2019 están actualmente
sobre la mesa.
“En el encuentro, las palabras ‘cancelar’ o ‘posponer’ no
fueron mencionadas. Somos una organización responsable con equipos de expertos
que se reúnen regularmente y atenderán las cuestiones que se vayan planteado,
pero no vamos a especular sobre el futuro”, subrayó Bach en la rueda de prensa
posterior a la reunión.
El máximo responsable del COI sí reconoció que la epidemia
está afectando a torneos de calificación de varios deportes, lo que podría
implicar cambios en las reglas de clasificación e incluso obligar a aumentar
las cuotas de atletas invitadas en determinados deportes.
“Algunos deportistas podrían verse imposibilitados de
participar en torneos de clasificación a causa del coronavirus, así que
hablaremos con las federaciones afectadas para buscar soluciones, que podrían
significar un aumento de las cuotas”, subrayó.
Esto significaría que algunas federaciones tengan que
invitar directamente a los Juegos a deportistas que bajo sus baremos
seguramente se habrían clasificado para Tokio 2020 si su torneo de
clasificación no hubiera sido cancelado, explicó el alemán.
Preguntado sobre si la actual crisis que afronta el deporte
por el coronavirus es el momento más duro de su carrera olímpica (primero como
deportista y luego como miembro del COI), Bach recordó que ya vivió otros momentos
difíciles, desde ataques terroristas como el de Múnich 1972 a los boicots
olímpicos en los años 70 y 80.
Bach y el resto de miembros de la Ejecutiva del COI fueron
informados este miércoles por el comité organizador de Tokio 2020 sobre los
preparativos con miras a esa cita deportiva, en principio prevista del 24 de
julio al 9 de agosto.
El presidente del COI señaló que los organizadores
detallaron los cambios que la epidemia de coronavirus ha obligado a efectuar en
los últimos meses, tales como la disputa a puerta cerrada de algunos eventos
para probar los estadios, y subrayó que les han transmitido “confianza”.
“Pudimos ver que el comité organizador, el gobierno local de
Tokio y el de Japón tienen confianza; y que las decisiones que están tomado se
han hecho de forma muy responsable y tras deliberación”, concluyó.