El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador,
aseguró este miércoles estar en contra de la legalización de la mariguana para
su uso lúdico, pese a que esa propuesta está en la mesa de los legisladores y
alberga opiniones divididas en su partido, el izquierdista Movimiento
Regeneración Nacional (Morena).

López Obrador, al presentar una campaña antidrogas durante
su conferencia matutina, dijo que no piensa en una medida para regular el uso
recreativo, sino en una “solo con propósitos médicos, sólo con propósitos
de salud”.

“Estamos analizando todo lo que ayude a que no haya
violencia, que no se incremente el consumo y que al mismo tiempo se garantice
la atención médica a quienes lo requieran”, resumió.

“Este tema de las drogas químicas, sintéticas, nos
importa mucho porque son de lo más destructivo y dañino que pueda haber”,
sostuvo el mandatario cuando fue preguntado específicamente por este producto.

Pese a este pensamiento del Presidente, a principios de este
mes empresarios y especialistas mexicanos crearon el Consejo Mexicano de
Cannabis y Cáñamo, un organismo que pretende ser un enlace entre la iniciativa
privada, los sectores salud, turístico, farmacéutico y agrícola y las
autoridades regulatorias para explotar el mercado del cannabis.

En enero de este año, el presidente de la Junta de
Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal, dijo que esperaba que la
reforma sobre la regulación del cannabis se aprobara antes de abril.

El proyecto liderado por el senador del partido de López
Obrador propone despenalizar el uso lúdico de la mariguana, incrementar de
cinco a 28 gramos la cantidad que puede portar una persona y establecer una
licencia para tener en posesión un volumen mayor.

La propuesta de Monreal no es la única registrada en las
cámaras, ya que, entre otras, el también diputado de Morena Mario Delgado
propuso a finales del año anterior la creación de un monopolio estatal para
comercializar la sustancia y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez
Cordero, también mostró su intención de despenalizar su uso.

A mediados de 2017, el Legislativo mexicano aprobó el uso
medicinal y científico de la mariguana, pero la Comisión Federal para la
Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) no ha llevado a cabo desde
entonces una regulación que facilite la comercialización e importación de
productos derivados de la planta.

En octubre de 2018, la Suprema Corte de Justicia de la
Nación (SCJN) estableció jurisprudencia para el consumo recreativo de mariguana
al dictaminar, por quinta ocasión, la inconstitucionalidad de la prohibición
absoluta al uso lúdico de la planta.

Empresarios de productos a base de cannabis ya han dicho
estar preparados para incursionar en el negocio de la producción y
comercialización de la mariguana.

Se estima que para 2021 el mercado legal del cannabis
alcanzará valores superiores a 31 mil millones de dólares, con una
concentración de 80% de las transacciones en Norteamérica.

Hoy día, la industria mueve ya unos mil millones de dólares
anuales en el mundo derivados de este tipo de productos.